Estudio DesinfoSTOP 2025. Retos y respuestas frente a la desinformación
«Realizamos el Estudio DesinfoSTOP 2025. Retos y respuestas frente a la desinformación».
El informe propone un pacto social por la verdad, para un mejor ecosistema informativo.
La desinformación no es coyuntural, es un fenómeno estructural que ataca a la democracia y a la cohesión social. Con este punto de partida, el informe DesinfoSTOP es una clave herramienta para la gobernanza, la planificación transversal y el fortalecimiento democrático. Permite pasar del diagnóstico a la acción pública. Su valor radica en que aterriza el fenómeno complejo de la desinformación en una herramienta para la identificación de actuaciones y la toma de decisiones.
Ofrece una visión integrada que une análisis social, tecnológico y comunicativo. No se limita a estudiar los bulos, sino que muestra cómo la desinformación afecta a la confianza institucional, a la cohesión democrática, a la salud… y a la competitividad de las empresas. Esa lectura sistémica permite anticipar riesgos y planificar respuestas.
Aporta evidencia empírica y marco estratégico. La combinación de encuesta, entrevistas y revisión bibliográfica permite identificar puntos críticos y articular respuestas. Por eso el informe sirve como base para planes de gobierno, estrategias educativas, de salud o empresariales.
Fortalece la coordinación interinstitucional. Facilita que distintos niveles de la administración trabajen con un lenguaje común y que compartan indicadores de impacto.
Articula ciencia, tecnología y sociedad. Ayuda a diseñar políticas de innovación responsable, alfabetización mediática y comunicación institucional.
El mayor riesgo no es creer en bulos, es dejar de creer en todo
Profundidad del estudio y del análisis: se han consultado 60 fuentes bibliográficas; realizadas 17 entrevistas a expertos; una encuesta a 1.362 personas; y análisis profundo de datos. Los resultados propios se han contrastado con otras investigaciones.
Todo ello es un sello de rigor y validez.
Algunos hallazgos:
“El 92% está preocupado por la desinformación: un consenso con pocos precedentes”
“El 95% ve bulos cada día: la desinformación se ha normalizado en la vida cotidiana”
“El 91% reclama formación para detectar bulos: la alfabetización mediática es la medida más demandada”
“Las mujeres muestran más preocupación por la desinformación: 95% frente al 89% de los hombres”
“El 30% de quienes tienen estudios básicos admite haber compartido bulos, frente al 23% con estudios superiores”
“Las mujeres recurren más a verificadores profesionales (28%) que los hombres (21%)“
“El 88% de la ciudadanía exige a las empresas implicarse contra la desinformación: la confianza será la nueva ventaja competitiva”